CITROËN XSARA KIT CAR – RALLY CATALUÑA 1999 – 1º

 

CITROËN XSARA KIT CAR – RALLY CATALUÑA ‘99 – 1º

 

A lo largo de los años ’90 del siglo pasado, Citroën incrementó paulatinamente su presencia en el mundial de rallies. Enfocados en categorías inferiores, primero el AX y más tarde el ZX fueron el preludio y la base sobre la que se asentaría el Xsara Kit Car, antesala de sus grandes éxitos en el mundial.

 

Citroën es una de esas marcas que, hasta principios de este siglo, lo mismo que Opel, Volkswagen, Datsun / Nissan o incluso BMW o Alfa Romeo, había tenido un cierto interés en los rallies, pero nunca se había atrevido a desarrollar (y menos aún a mantener en el tiempo) un proyecto puntero y ganador en la máxima categoría.

 

En el caso de Citroën, había estado presente en los rallies ya desde los años ’60 del siglo pasado con el Citroën DS, en los ‘70 con el GS, y ya en los ’80 con el AX, el Visa e incluso un sorprendente BX que desarrollaron como grupo B. Siempre, eso sí, por una u otra razón limitando sus presencias a participaciones esporádicas, generalmente no en la categoría reina, y obteniendo resultados más bien discretos.

 

A mediados de los ’90 existía la reglamentación Kit Car. Para que nos entendamos, ésta era una especie de “categoría de plata” de los rallies. Los Kit Car se distinguían por tener casi 300 CV, un peso mínimo inicialmente de 960 kg y tracción delantera.

 

Citroën halló en esta reglamentación el trampolín que necesitaba para desarrollar con calma un proyecto ganador. Primeramente, Citroën desarrolló el ZX de raid con el que se impuso varias veces en el Dakar de los ’90. Paralelamente, desarrolló el ZX de rallies en su categoría kit car, con el que obtuvieron numerosos éxitos en campeonatos nacionales y rallies de asfalto. Y más tarde lanzarían el Saxo 1600 y al mismo tiempo el Xsara Kit Car, base (también exitosa) sobre la que desarrollarían el futuro Xsara WRC.

 

Entonces no se sabía, pero poco a poco, con mucho esfuerzo y tesón por parte de la marca, Citroën formó un equipo ganador sustentándose en el Xsara que con tanto mimo, dedicación y tiempo evolucionaron.

 

El Xsara tomaba como referencia el modelo de calle respectivo, un compacto con aires de berlina corta, muy polivalente y que en su versión de calle tuvo una gran aceptación, sobre todo entre el público juvenil.

 

En su versión de competición, el kit car fue desarrollado por el francés Philippe Bugalski y el español Jesús Puras, 2 especialistas de asfalto. A los mandos del Xsara Kit Car, los dos serían varias veces Campeones nacionales de sus respectivos países; 3 en el caso de Bugalski, y otras 3 en el caso de Puras, además de otras 2 con el ZX predecesor del Xsara. A tal punto el desarrollo fue un éxito que, aprovechando una reglamentación favorable a los Kit Car, el vehículo fue capaz de imponerse en los rallies de España y Francia de 1999, de la mano de Bugalski, a todo el elenco WRC del momento. En aquellos 2 rallies de 1999 Citroën demostró que, en rallies de asfalto existía la posibilidad de plantar cara a los todopoderosos WRC (siempre y cuando no lloviera), aprovechando las 2 grandes virtudes de este tipo de coches: su reducido peso para prácticamente la misma potencia que los WRC. Y es que en esencia, los Kit Car fueron la versión modernizada del Lancia 037 de grupo B.

 

Paradójicamente, Citroën no vencería ningún Campeonato del Mundo de 2 Litros (Kit Car), pero la experiencia obtenida, sumada al cambio de reglamentación del año 2000 que llevó a la desaparición de los Kit Car les llevaría, esta vez sí, a adaptar el Xsara Kit Car a la máxima categoría, al WRC donde terminaría ganándolo todo. Pero esto ya es otra historia y otra miniatura.

 

 

PALMARÉS
Campeonato Mundo Marcas	0
Campeonato Mundo Pilotos	0
Copa FIA Pilotos
Rallies Campeonato Mundo
1er puesto	2
2º puesto
3er puesto

 

 

 

 

La miniatura

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

FICHA DE MINIATURA

 

Modelo	Citroën Xsara Kit Car
Escala	1/24
Rally	Cataluña
Año	1999
Pilotos	Bugalski – Chiaroni
Fabricante	Altaya
Referencia	WRC Collection
Molde	Excelente
Pegatinas	Excelente
Interior	Bueno (salpicadero algo pobre)
Acabado	Excelente
Calidad general	Excelente

 

 

 

 

 

 

El Rally

 

La 5ª prueba del Mundial de 1999 era el rally de Cataluña. El Cataluña de aquel año se disputaba en 3 días, en la provincia de Girona, con la etapa central en los alrededores de Tarragona. La sede, un año más, era la localidad costera de Lloret de Mar, con varios tramos concentrados alrededor de ella.

 

La de finales de los ’90 y principios del 2000 fue una de las épocas más disputadas del mundial de rallies, y al evento español acudió todo el elenco de marcas que peleaban por el mundial en la máxima categoría (WRC).

 

Así, Mitsubishi inscribió 2 Lancer para Mäkkinen y Loix; Ford inscribió 2 Focus para McRae y St Joseph; Subaru apuntó 3 Impreza para Richard Burns, Juha Kankkunen y Bruno Thiry; Seat inscribió 2 Córdoba para Harri Rovanperä y Piero Liatti; Skoda 2 Octavia (uno de ellos para Armin Schwarz) y Toyota 2 Corolla para Carlos Sáinz y Didier Auriol.

 

Pero además, disputada por entero en asfalto, la prueba catalana daba opciones a los Kit Car, con lo que las 3 marcas francesas tenían opciones reales de victoria: Peugeot había inscrito tres 306 Maxi, Renault un Mégane para Oriol Gómez y Citroën 2 Xsara para Jesús Puras y Philippe Bugalski.

 

Hemos dedicado 2 párrafos simplemente a la presentación de los inscritos, lo que debería bastar para darnos cuenta de hasta qué punto la inscripción era de auténtico lujo. A priori, hasta 20 coches contaban con opciones reales de victoria.

 

 

El inicio del rally se hizo esperar, ya que la organización anuló el primer tramo por exceso de público. Mäkkinen, único en pasar por ese tramo porque abría carretera, se quejó (con razón) amargamente, por el riesgo asumido al haber sido el único en correr el tramo (con el consiguiente riesgo de accidente) además del desgaste de neumáticos.

 

A partir del 2º iba a suceder algo esperable, pero no por ello menos sorprendente: A los mandos del segundo Xsara, Jesús Puras cogió el liderato del rally marcando 3 scratch en los 4 primeros tramos, y el resto de ese primer día (que contaba con 8 tramos) se dedicó a administrar su ventaja. Ese 1er día acabó con Puras líder, seguido de Bugalski a 7 segundos (con el otro Xsara Kit Car oficial), y detrás los dos Toyota de Auriol (ganador del Cataluña del año anterior) y Sáinz, a 10 y 17 segundos. Mäkkinen, 5º a medio minuto, cerraba el quinteto de cabeza. De entre los WRC, tanto Subaru, como Skoda, como Seat, se descolgaron rápido de los puestos de cabeza, con coches que, lamentablemente, nunca terminaron de funcionar en asfalto.

 

El día siguiente iba a amanecer con una desagradable sorpresa para el líder, Puras: el motor de su Citroën se negó a arrancar y Jesús se vio obligado a retirarse sin siquiera poder salir a los tramos del 2º día para defender su merecida 1ª plaza provisional. Bugalski, que hasta ese momento había jugado la carta de la prudencia y se había mantenido siempre por detrás de Puras, no desaprovechó la ocasión y heredó un liderato en ese 9º tramo (Prades) que refrendó con su 1er scratch y ya no abandonaría.

 

Si hasta ese momento había pasado relativamente desapercibido haciendo cuartos y quintos scratches, a partir de ahí se marcó una impresionante exhibición en esa 2ª y en la 3ª etapa, anotándose la mitad de los scratches de los 10 tramos restantes. Bugalski supo no solo resistir, sino acrecentar su ventaja y dominar un rally de principio a fin con el que dio al Xsara una brillante 1ª victoria en el Campeonato del Mundo. De manera absolutamente brillante, la pareja Bugalski – Chiaroni se impuso por delante de toda la flor y la nata del mundial. Y para dar todavía mayor dimensión a su victoria, nótese el dorsal que portaba en las puertas: el 16, muy alejado de los pilotos prioritarios (los 10 primeros números).

 

Como anécdota, McRae marcaría sus 2 únicos scratches en las 2 pasadas por La Riba, un largo tramo de 30km del Cataluña de aquel año. Los scratches no le servirían a título individual (andaba hundido en la clasificación a más de 7 minutos y terminaría retirándose voluntariamente, por falta de motivación), pero sí demostraron el enorme potencial del Focus, que ya había ganado (siempre con McRae a los mandos) en los 2 rallies anteriores que se habían corrido en tierra: la grava portuguesa y la sabana africana del Safari.

 

De entre los ilustres, también Sáinz terminaría abandonando, una vez más acosado por su mala suerte y problemas que sólo acosaban al de siempre, a nuestro ídolo español. Sáinz, que había ido cediendo posiciones a lo largo del rally por diversos problemas mecánicos, se vio obligado a abandonar en el último tramo cuando se le rompió la correa del alternador. Totalmente gafado, acabaría con su 4º abandono consecutivo en el rally de casa.

 

Auriol (que había ganado brillantemente el año anterior) se aprovechó de los abandonos de Puras y Sáinz para terminar 2º, si bien lejos de Bugalski. Mäkkinen y Loix terminaron 3º y 4º, alejados a más de 2 minutos de Bugalski; con Richard Burns 5º.

 

La victoria de Bugalski con el Xsara Kit Car marcó un antes y un después en el Mundial de rallies. Los pilotos y marcas con coches WRC llevaban tiempo quejándose amargamente de que vehículos de menor potencia y cilindrada les plantaran cara en determinadas condiciones (asfalto seco), y la victoria del Xsara Kit Car en Cataluña terminó de dar eco a sus lamentos. Los pilotos WRC alegaban que tenía poco sentido que las posibilidades de los vehículos WRC se limitasen a la tierra / superficies deslizantes, mientras que en asfalto seco los Kit Car (con menor potencia y prestaciones pero también con mucho menor peso y presupuesto) eran los verdaderamente favoritos.

 

Apenas 15 días después del Cataluña, Bugalski volvería a imponerse en otra prueba de asfalto, el Tour de Córcega, materializando con ello los temores de las marcas que se jugaban el mundial.

 

La FIA, presionada por las marcas con vehículo WRC, terminó por aceptar las críticas y de cara al 2000 lastró los Kit Car con 40kg adicionales, esfumando así sus posibilidades de victoria.

 

Citroën, flamante campeona de ambos rallies, entró en la historia del Mundial al vencer con un coche teóricamente inferior a todos los grandes “cocos” del momento. Pero además, muy inteligentemente, utilizó toda su experiencia con el Xsara Kit Car para convencerse, ya sí, de que tenía mimbres de sobra para lanzarse a por un proyecto mundialista. Y vaya si lo haría. Paso a paso, la marca del doble chevrón iría juntando todas las piezas hasta llegar a conformar uno de los equipos más victoriosos de siempre. Pero esto ya es otra historia, y otra miniatura.

 

 

 

CLASIFICACIÓN FINAL

 

1	Bugalski – Chiaroni	Citroën Xsara Kit Car	4:13’:45’’6
2	Auriol – Giraudet	Ford Focus RS WRC ‘03	a     ’:31’’8
3	Mäkkinen – Mannisenmäki	Mitsubishi Lancer E 6 WRC	a   2’:21’’1
4	Loix – Smeets	Mitsubishi Carisma WRC	a   2’:35’’4
5	Burns – Reid	Subaru Impreza WRC ‘99	a   4’:01’’9

 

 

 

Fuente: aquí

 

 

 

Fuentes: aquí y aquí. Arriba y abajo, Philippe Bugalski apurando en sendos cruces del rally de Cataluña. En medio, el Citroën Xsara de Bugalski en una apurada de frenada del famoso tramo Gratallops – Escaladei.

 

 

 

 

La anécdota

 

Adquirido en marzo de 2024. Un coche bonito y muy similar a las versiones de calle, que sin duda me trae recuerdos de mi adolescencia.

 

El rally, te invito a verlo aquí, en el programa resumen que en su momento emitió Canal +.

 

El Cataluña ’99 fue un rally histórico por su significado, la 1ª victoria de un Kit Car en la máxima categoría, anteponiéndose a toda la flor y la nata de los WRC que por entonces dominaba el Mundial. El malogrado Bugalski, además, pese a ser relativamente poco conocido en España, fue toda una institución en Francia, donde dio continuidad a todo un elenco de pilotos galos (Thérier, Andruet, Darniche, Auriol, Ragnotti…) que tradicionalmente dominaban en asfalto y daban un acento latino al mundial.

 

Un modelo que, en definitiva, no podía faltar en la colección.

 

Abajo, foto de 2 generaciones de Citroën. A la izquierda, el todopoderoso C4 de 2008 con el que Citroën ganó todo. A la derecha, el Xsara Kit Car de una década antes, 1999, con el que Citroën inició su andadura seria en el mundial.